Por supuesto el gusto y estilo de cada uno es siempre lo más importante, pero muchas veces no sabemos o no nos imaginamos el resultado final de un anillo tan especial.
Lo que recomiendo en estos casos es dedicar un tiempo a mirar mucha joyería, investigar y ver los distintos diseños y estilos que existen porque te puedes sorprender!
Esto te ayudará también a descubrir si lo que buscas es un diseño clásico y atemporal o si a lo mejor prefieres que sea diferente y/o conceptual.
Esta información es básica para empezar a trabajar.
A continuación os planteo las variables a tener en cuenta para elegir un anillo de pedida personalizado:
Qué piedra escoger y con qué forma nos gusta (redonda, oval, marquise, corazón…) o a lo mejor nos interesa una composición de piedras; un tresillo o una orla. La dureza, el tono y la combinación de color tanto de las piedras como en el metal son detalles importantes a tener en cuenta.
Cómo irá engastada nuestra piedra? El tipo de engaste determina el estilo del anillo a la vez que realza y protege la piedra; los chatones cubren más y tienen un efecto más discreto (recomendable siempre que la piedra no tenga una dureza muy alta) en cambio las garras hacen que la piedra se vea más grande y que la luz entre mejor.
En cuanto a la forma del anillo: La sección del brazo puede ser redondeada, cuadrada, puede tener galerías, texturas…
Las caracteristicas del metal de nuestra elección juegan un papel importante también de cara al diseño y a la funcionalidad de la pieza; la plata es un metal muy versátil pero en determinadas estructuras conviene que la pieza sea de oro por la estabilidad, diseño o composición de la misma.
Y por último, vuestro tope de presupuesto: Muy importante teniendo en cuenta que tenemos muchas variables, recuerda que yo todo lo hago a mano y me puedo adaptar perfectamente.